Precioso, Begoña. Lo de la mujer del pescador me ha hecho pensar. Los que vivimos tan lejos del mar no tenemos noción de esos desvelos que sufren otras personas. Un abrazo
Como bien dices de todo un poco y cada uno es una preciosidad, qué bello el del pescador y qué dura es esa vida tanto de ellos como de sus mujeres, siempre pendientes y mirando el horizonte para verlos regresar.
Begoña, por fin puedo entrar a tu blog, menos mal! Bueno, ya te decía que extrañaba no poder leer tus poemas... Y me han encantado los de hoy. Como siempre, la bailarina, la magia de la tierra, la mujer del pescador y tu ritmo tan original y hermoso. Un beso mi amiga.
Me gustó mucho destos versos.
ResponderEliminarBesitos
Precioso, Begoña. Lo de la mujer del pescador me ha hecho pensar. Los que vivimos tan lejos del mar no tenemos noción de esos desvelos que sufren otras personas. Un abrazo
ResponderEliminarComo bien dices de todo un poco y cada uno es una preciosidad, qué bello el del pescador y qué dura es esa vida tanto de ellos como de sus mujeres, siempre pendientes y mirando el horizonte para verlos regresar.
ResponderEliminarBesos!
Te he dejado una acuarela en mi post http://zonailuminada.blogspot.com.es/2013/08/acuarelas-para-todos.html
ResponderEliminarHola amiga Abedul gracias por tu huella.
ResponderEliminarMe gustan tus tres poemas.
Un abrazo fraterno de MA.
Begoña, por fin puedo entrar a tu blog, menos mal! Bueno, ya te decía que extrañaba no poder leer tus poemas... Y me han encantado los de hoy. Como siempre, la bailarina, la magia de la tierra, la mujer del pescador y tu ritmo tan original y hermoso. Un beso mi amiga.
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